LA FAMILIA

Esto creo que es la continuacion de la luz, la niña del carromato, y como llegue aquí... aunque ya no lo sé seguro jajaja... La historia se complica y hay q darle argumento... asi que en fin... me ha costado mucho jajaja... pero aki va

La puerta de la casa chirrió, y Uta Karneille salió apresuradamente.
-Mi querido amigo Loor… Te estaba esperando. ¿Qué tal el viaje? -Preguntó.- Supongo que estarás cansado. Pasa dentro. Comeremos algo… -Tenemos tanto que contartnos, y tantas cosas por hacer…-
Uta no pudo terminar la frase porque se percató de que su nieta estaba presente.
-Señor Loordardos, veo que ya conoce a mi nieta. Espero que no le haya molestado… Ya sabe como son los niños…- Dijo Karneille en tono de reprimenda.
-Para nada mi querida Uta. Yo diría que hasta nos hemos hecho buenos amigos.- Dijo Loor mientras le guiñaba un ojo a la niña.
Charlenne los miraba perplejos… ¿Qué relación podría unir a su abuela con ese cazador?..
-Char, este señor y yo tenemos cosas de que hablar… ¿Por qué no vas a casa del tabernero Farley y compras un poco de vino para comer?... No te demores mucho, que la comida en seguida estará… Y…
-Sí, abuela, ya lo sé… No te separes del sendero!!!.-
Loordardos rió viendo como aquel cuerpo minúsculo se alejaba dando saltitos por el sendero pedregoso. ¿Cómo podía ser el destino tan caprichoso con esa niña?
Uta miro a ambos lados y después cogiendo a Loor del brazo se metieron en la casa.
Char andaba apresuradamente por el sendero, venía cargada con el vino y le pesaba demasiado… En ese momento oyó un ruido entre unos matorrales.. La pequeña ni corta ni perezosa, cogió unas piedras del suelo, y sin pensárselo dos veces las arrojó contra el seto…
Después de tres ¡Ouuuchhh! Y algún que otro ¡Cómo duele!... Tres cabecitas asomaron por encima del arbusto…
-¡Otra vez espiando a mi abuela!, ¿Es que los niños de este pueblo no teneis nada mejor que hacer?.- Chilló Char.
Los tres muchachos salieron cabizbajos y algo ruborizados.
-¿Eres… Charlenneeee verdad?.- Preguntó Ukas. Sin duda, las magulladuras que tenía en las rodillas, y los rasguños de los codos indicaban que era el más travieso de los tres.
-Sí, asi es…¿ y vosotros… sois???.- Dijo Char mirándolos por encima del hombro.
-Somos tres poderosos guerreros, niña… Deberías… tener más respeto con nosotros…- Dijo Rocaferro con decisión.- Sin duda éste era el bravucón del grupo.
-¿Ah si?.- Dijo Charlenne sonriendo.- ¿De verdad sois unos guerreros?... Sois un poco bajitos para luchar, ¿No créeis?... Demostrarme lo que sabeis hacer.
Char se sentó en una gran piedra al lado de los chicos. Dejó el vino en el suelo… Y cruzó los brazos expectante.

-Estooo…. La lucha no es cosa de niñas, sabes.- Dijo Roca con vehemancia.- Deberías irte a coser, jugar con tus muñecas o hacer lo que sea que hagáis las niñas de tu edad.
Charlenne se levantó enfurecida y con el pie derramó el vino sobre la tierra. Estaba dispuesta a demostrarle a Roca que las niñas de su edad sabían defenderse perfectamente…
-Roca… Deja a la niña en paz.- Dijo Madeo amablemente mientras se frotaba la cabeza. Por lo visto una de las piedras de Char había atinado, y en cuestión de minutos, un gran chichón aplomaría la frente del muchacho.- Tiene todo el derecho a estar enfadada… Al fin y al cabo… estamos espiando a su abuela.
El último que hablaba era Madeo. Si Ukas era el travieso del grupo, y Roca el bravucón… Éste último era el nexo de unión entre ellos, el espíritu del grupo. Se notaba a distancia que daría todo lo que tenía por sus hermanos… Eran la única familia que le quedaba.
-Chisssssssst.- Dijo Ukas.- Dejar ya eso y venir aquí. La vieja está hablando con el extraño y no oigo lo que dicen
Los cuatro muchachos se pusieron de puntillas apoyados en el quicio de la ventana.
-Uta, Tenemos que decírselo a Char, ya.- Dijo Loor.- Ya han muerto casi todos, y sabes que la horda no se va a detener ante nada… Tarde o temprano darán con ella, y si la encuentran… La liga de expedicionarios hemos puesto todas las esperanzas en ella-
-Entiende, Loor, que este afligida… Acabo de descubrir que mi familia ha muerto, y lo único que me queda es… esa niña… No puedo dejarla marchar tan pronto…
-En realidad Uta… Uno de los hermanos de Char, consiguió escapar con vida… o almenos eso créemos. La liga esta buscando a Markhus… pero todavía no tenemos éxito…
Char estaba afligida, y triste, muy triste. Deseaba correr y alejarse de allí lo antes posible… Darse cuenta de que todo no era sino una pesadilla, y despertar… Volver a estar en casa y corretear por los campos sin ninguna preocupación…
Una mano con fiereza se le posó el hombro.
-No estés triste niña. A partir de ahora nosotros seremos tu familia.- Dijo Madeo con firmeza.
-Cuidaremos de ti.- Asintió Ukas.-
Char no entendía como tres mocosos que no levantaban un palmo del suelo iban a poder cuidar de ella, pero se sintió algo mas reconfortada. Se quedó mirando a Roca, que seguí sin decir nada…
-Está bien…- Dijo Roca.- Cuidaremos de ti… Al fin y al cabo, una de las misiones de los guerreros es rescatar a damiselas en apuros…
Char iba a decirle que no era una damisela en apuros, y que quizás no necesitara su ayuda cuando…
-Uta, no estamos solos.- Dijo Loor.- Alguien está escondido detrás de esa ventana.-
Loordardos se dirigió hacia la cortina y cuando la abrió….

CONTINUARA.