domingo, 28 de junio de 2009

La niña del carromato

Continuacion de Como llegue hasta aqui.

La anciana miraba con ojos velados por la edad al camino, Uta Karneille había perdido todo lo que un día había querido, o casi. La última perdida y la más dolorosa había sido su hija menor Aaulum, no la veía desde que en contra de su voluntad se había casado con un pobre granjero de Trabalomas, y ya no la volvería a ver. El orgullo había podido mas que el amor de una madre, ahora su arrepentimiento la quemaba por dentro, la maldición de los Karneille una vez mas pesaba como una losa fantasmal sobre su alma.
Uno de los gatos de la casa, un viejo gato pardo de grandes bigotes al que le faltaba una oreja, el mas osado de la casa. Se acercó al dintel de la puerta, y se frotó contra los pliegues de su falda. El gesto la trajo de vuelta al mundo real, volvió mirar al camino, y la sintió llegar. Aún estaba lejos, a unas tres millas de allí pero sentía su presencia con fuerza, cerro los ojos y abrió su mente al poder arcano, buscando la luz de su alma. La fuera de aquella pequeña alma la pilló por sorpresa, su fuerza era increíble, nunca había visto algo así, y menos en nadie de su familia. No salía de su sorpresa, ¿ sería aquella pequeña la heredera?, aquella pequeña alma era la de su nieta Charlenne, la hija de Uta, a la que aún no conocía.
Esta vez se juró no repetir el mismo error, esta vez no, nunca más. No mas ocultaciones, no mas aprensiones, no mas mentiras, no mas miedo …y había perdido demasiado. En ese momento juró proteger y cuidar a aquella pequeña con todas su fuerzas, y juró que llegado el momento se lo contaría todo.
Pero eso quedaría para mas adelante, había mucho trabajo por hacer, la casa no estaba preparada para alojar a una niña. Cuando miró el alma de su nieta no sólo encontró en ella su fuerza, si no que también sintió su pena, su tristeza sin fin, y sus miedos. Decidió que eso era a lo primero que habría que poner remedio.
Salió de la casa, y se dirigió hacia el río, la casa esta al sur oeste de Villa Dorada, muy cerca del Bosque Oscuro. Lo bastante para mantener la casa fuera de las miradas curiosas, y apartada de los caminos mas transitados. Para una bruja como ella, la discreción era una regla a no olvidar, y más en los tiempos que corrían. Se concentró e invocó a Nargull´d su elemental de agua, sobre las frías y rápidas aguas se formó un torbellino que se levantó a una altura de unos dos metros, girando y girando el torbellino fue tomando la forma del elemental. Era como ver un gigantesco flan de gelatina azul, pero con dos fuertes brazos y una enorme cabeza , sin ojos pero con una boca acorde a la cabeza también enorme.

- Nargull´d viejo amigo, tenemos invitada para cenar, y no tengo tiempo para pescar.


Si hacer el menor ruido el elemental se fundió con el río en uno solo, a los pocos segundos surgió una cesta formada por agua rebosante de pescado fresco, al que Nargull´d ya había quitado a vida para evitar trabajos a su ama. Uta le envió un pensamiento de gracias y lo dejó marchar. Regresó con su húmeda cosecha a la casa, tenía una cena que preparar para ella, sus gatos, y su nieta ala que pronto conocería.

Ya no lejos de allí el carromato volvió a tropezar con una piedra en el camino, la rueda trastabilleó con fuerza y la pequeña Charlenne dio un salto involuntario. Miró al carretero con el que casi no había terciado palabras desde que había abandonado Trabalomas,-Bueno, le pagaban por llevarla segura hasta la casa de su abuela, no por darle conversación penso.
Entonces el le hablo. -Niña ve atrás y recoge tu cosas, estamos llegando.
El carro abandonó el camino por la derecha y se dirigió por una estrecha y mal cuidad senda, era evidente que se usaba muy raramente. Charlenne recogió su petate, era ligero ya que pocas cosas contenía en su interior, lo poco que se traía de su vida al aldo de sus familia. De forma involuntario toco su medallón, el medallón de su madre, se acordó de ella, de sus hermanos, y lo notó cálido, reconfortante, casi sedante. Por un momento se disiparon sus preocupaciones y se relajó su tristeza, ya llegaba…pronto conocería a su abuela..la vieja de los gatos. Alzó orgullosa el mentón, no le tendría miedo, bueno…no mucho, al menos esperaba que no se le notara.
Volvió al asiento delantero de carromato a tiempo para dislumbrar unas tenues y parpadeantes luces entre al lluvia un poco mas adelante.

La lluvia era fría , y estaban calados hasta los huesos, pero eran niños acostumbrados al rudo clima de Elwing. Se habían escapado de sus faenas diarias, pese a saber que les causaría una buena riña al volver. La culpa como siempre era de Ukas, no sabían como pero siempre los metía en líos. Esta era su ultima ocurrencia, había cruzado todo el camino desde Villa Dorada hasta cerca del río solo para espiar a la “vieja de los gatos”, se decía que era una bruja. Un rumor lo bastante interesante como para que Ukas hubiese organizado excursión no autorizada a la casa de la vieja, una misión de espionaje les había dicho, solo para valientes les arengó una y otra vez. No pudieron resistirse, nunca podían… ni siquiera Roca que era el mas serio y sensato de los tres sabía como decirle que no. Y así acabaron mojados los tres, detrás de el mojón de un viejo castaño a escasos metros de la casa, ocultos, espiando…Vieron salir a la vieja hacia el río , pero no se atrevieron a seguirla, esperaron donde estaban, al poco ella volvió cargada con un cesto de pescado.
-Roca, esa pesca mejor y mas rápido que tu- rió Madeo- si fueses así de bueno no pasaríamos ni la mitad de hambre.
Por respuesta recibió un seco coscorrón en la nuca, esta vez Madeo no respondió a la clara invitación a pelea, el lugar no se prestaba a ello. Esperaron un rato mas , con la inocente esperanza de ver salir rayos, de la casa , o algo así …cosas de brujas. Pero no sucedía nada de nada, aburridos y mojados decidieron marcharse, su aventura había terminado en húmedo aburrimiento esta vez, era una novedad.
Se disponía a marcharse cuando oyeron relinchar los caballos, un carro bajaba por la colina hacia la casa por el viejo camino. Se ocultaron de nuevo, esa si era un novedad, ¡la vieja tenia vista!. Esperaron ocultos en la semisobra a que el carromato pasase a su lado, era un carromato desvencijado y mal cuidado, se notaba que había hecho un largo camino hasta alli…entonces la vieron..Estaba sentada en la parte delantera, justo del lado del camino en el que ellos se ocultaban….nunca olvidarían aquel dia.

Continuara….

6 comentarios:

  1. Absolutamente genial, continuas la historia de la pequeña Char y enlaces de forma magistral con la de los tres mozuelos, madeo, Roca y Ukas. Harán grandes cosas junto a la pequeña. Seguro!! Fantástico Char.

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  2. Estoooooooooo ...gracias pero le he escrito yo XDDDD
    Madeo

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  3. Uyyyyy..., pensé que lo había escrito Char, como continuación de su propia historia. Sorry, me ha confundido lo de TE LO DICE CHAR. Enhorabuena Madeo, es genial! pero..., no le tocaba a Char continuarla? Qué lío!!

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  4. Lio ....eso es lo divertido, pero Char la que tiene que continuar es la tuya, y tu ahora esta XDDDD
    O algo asi XDDDD
    Madeo

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  5. oye... es una pasada... mi abuela esta loca y ademas... soy la novedad del pueblo jajaja.

    yo no lo hubiera escrito mejor.

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  6. Loca, bueno , algo quizas.....pero yo creo que te deparará muchas sorpresa la vieja dama.Depende como lo continueis XD

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