martes, 5 de mayo de 2009

Las locas aventuras de Madeo y compañia

Paseaba Madeo tranquilamente por el bosque de Terrokar, allá en Terrallende y decidió detenerse a la sombra de un árbol a fumar una pipa. Ya cansado de matar polillas gigantes venenosas, era hora de ir a cobrar su paga de mercenario, tres oros no son muchos pero menos es nada.
Era un día caluroso, así que acerco su caballo pinto a un riachuelo para que pudiese saciar su sed, no lejos veía unos bichos verdes con caras de malas pulgas, pero por esta vez no lo molestaron. Apoyó la espalda en un chopo ( o algo parecido), y tras encender la pipa decidió pararse a leer los comentarios del Chat, como siempre esbozó una sonrisa al ver que algunos de sus inseparables compañeros de fatigas andaban por allí.
Un aviso verde de Rocaferro, lo puso en alerta, el brazo duro de la hermandad necesitaba ayuda para matar no se que infernal perro de dos cabezas, que ya lo había mandado a pasear de ángel transparente un par de ocasiones. Presto como siempre, apagó su pipa y corrió a galope tendido camino del Valle Sombraluna para ayudar a Roca, al que le debía unas cuantas cervezas ya.

Por el camino se dio cuenta de que su pobre caballo pinto estaba en las últimas, y necesitaba ya una jubilación anticipada, demasiadas batallas ya había sufrido el pobre…bueno esta sería una mas, quizás la última para el .
Tras sortear toda clase de demonios y lagunas ponzoñosas, se encontró a Roca en unas colinas yermas mirando al frente con ojos de ira. No lejos se veía un can de dos cabezas, que escupía fuego por su espalda. Ojeó el indicador…mmmmm….un elite de nivel 70, no sería fácil para Madeo.
Tras preparase para la batalla, Roca se lanzó de cabeza contra el can maldito, …..un desastre. Tras unos minutos de lucha, nos vimos transparentes en el cementerio más cercano y con cara de idiotas.

-Roca, necesitamos un cambio de estrategia .
-Si, fue su contestación. Tan explícita y contundente como siempre.

Tras cambiar espada de dos manos por espada diestra y escudo, lo intentamos de nuevo. Esta vez la lucha fue sin cuartel, mandobles, golpes brutales, paradas con escudo, mas mandobles…creo que acabé mordiéndole en una pata por pura desesperación. Pero al final, con un estruendo, calló muerto en el polvo, y yo comiéndome unas raspas de sardinas para recuperar energías.

Luego se unió a nosotros un enano cazador del nivel 80,de nombre Glober, necesitaba ayuda para intentar capturar vivo al can y convertirlo en su mascota. Yo lo miré de reojo, y me limité a asentir con un gruñido. Total, de perdidos al río, y ya que estábamos allí….¿por que no?

Así que de nuevo a la lucha, de nuevo fracasamos en el intento, el bicho se resistía y se nos moría antes de dejarse capturar. Al final ni con la ayuda del todo poderoso hermano Loordardos fuimos capazes. Tras tres intentos, con la armadura ya toda abollada, el escudo mellado, un dedo asomando por la bota rota y la espada sin filo…decidimos dejarlo y trasladarnos al pueblo más cercano a reparar ese desaguisado.

La recompensa de las polillas venenosa no alcanzó ni para la mitad, pero ya le debo menos cervezas a Roca :-D.

1 comentario:

  1. jajaja eso os pasa pq no veis el encantador de perros... (programa de 4)... Hubierais sabido q si le acariciabais detras de las orejitas se volvería tan manso como la pekeña Lassie...

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